domingo, 10 de abril de 2022

Infancia

  Sandra Kuck


La tía Catalina solía leerme un cuento
en los ratos libres.
Ella tenía los ojos color del cielo.
Yo con mis tres años
la escuchaba...
De a ratos,
maravillada por el relato,
sólo miraba sus ojos.
Sus palabras se desdibujaban en mi mente.

Sabía de memoria
el misterio de los alfabetos.

L.Fraix