domingo, 27 de marzo de 2022

Poema I

 


Me gusta doblar las fotos antiguas:
en el umbral contaba monedas de cobre y soñaba...
sentía olor a felicidad dormida en las rojas baldosas.
bajo los verdes pinos de la vieja avenida
mientras recorría el camino ciego, sin llantos,
ese camino imaginado de cuentos y de monólogos
que me esperaba al final de la tarde perfecta.
Hablo de mi niñez sin lluvia en los ojos,
y puedo inventar los días saltando rayuelas,
el rodar, el dulce de los caramelos prestados,
y la melancolía temprana de la infancia aquella
golpeando las puertas para huir de su inexorable destino.

L.Fraix