lunes, 1 de junio de 2020

Del paisaje, los motivos


En el temprano confín
se esculpen las azucenas
con oropel de diademas,
policromía sin fin.

De mi jardín, los rosales
se ufanan de la arrogancia
de ese sol y su prestancia
oculto entre los umbrales.

Atiborrada de granos
la prolífica mazorca
es como un verso de Lorca,
la dádiva de sus manos.

De mis ojos, la mirada
es alondra detenida
en la rueda de la vida
como pregón de la nada.

Luján Fraix